Un terremoto es una sacudida repentina de la superficie de la Tierra. Este es el resultado de las tensiones que se han acumulado dentro de la corteza quebradiza de la Tierra. Hay diferentes tipos de terremotos, dependiendo de la parte del mundo en que se producen.
Los terremotos son algunos de los peligros naturales más mortales. Hay alrededor de 100 terremotos graves cada año.
Los terremotos golpean sin previo aviso y muchas de las zonas sísmicas de la Tierra coinciden con las zonas de alta densidad de población. Cuando los grandes terremotos ocurren en esas zonas los resultados pueden ser catastróficos, con una terrible pérdida de vidas humanas y un costo económico incalculable.
Sismología:
Sismología es el estudio de los terremotos y las ondas sísmicas. El sismógrafo registra las ondas sísmicas generadas por terremotos, permitiendo al sismólogo determinar dónde y qué tan profundo, un terremoto será.
Además, las ondas sísmicas de los terremotos se pueden utilizar para obtener imágenes del interior profundo de la Tierra, proporcionando pistas vitales a la estructura interna de nuestro planeta.
Impacto que un terremoto puede causar
- Sacuden edificios y casas y pueden hacer que los objetos y escombros caigan resultando en lesiones personales o muertes. Cuanto más tiempo dura un terremoto, más extremo es el daño.
- Muchas muertes se han producido a partir de personas que se desplazan prematuramente durante un terremoto y son golpeados por la caída de objetos.
- Líneas eléctricas caídas pueden dejar comunidades sin electricidad.
- Chimeneas rotas, de gas o líneas eléctricas pueden causar incendios. Derrames químicos crean peligros y tuberías de agua rotas pueden cortar los suministros de agua.
- Los terremotos pueden desencadenar deslizamientos de la tierra y las olas del mar sísmicas (tsunamis). Si fallan las represas, se pueden producir inundaciones repentinas.